martes, enero 08, 2008

Demasiado humano

Esta tarde alguien me ha recordado que tengo un blog. Un blog titulado "Diario de un tipo distraído". ¡Y tan distraído! ¡Como que llevo casi un año sin escribir nada! ¡Completamente distraído! ¡Qué vergüenza! Ha sido como si me recordaran que tengo un perro al que no saco a pasear o un hijo a quien no doy de comer...Bueno, esto último tal vez sea una exageración. Aunque pensándolo bien, un blog no es un hijo, pero se le parece...Hay que engordarlo y hacerlo crecer, y hay que cuidarlo.
Pero es que me falta tiempo. Hago demasiadas cosas. Quiero ser un Leonardo da Vinci, y me quedo en un aprendiz de brujo. Pero así son las cosas. El hombre dispone y...
Quisiera que los días tuvieran 28 horas, y aún así tampoco creo que hiciese más. Yo soy un hombre pensante, un soñador. Levanto castillos en el aire, mi obra nunca verá la luz, nunca traspasará las fronteras de lo mental. Resistirá más que nunca el paso del tiempo, y cuando las pirámides se derrumben, mis sueños permanecerán intactos, a la espera de que algún otro u otra recoja el testigo de mi imaginación.